No recuerdo el número exacto de veces que vi a estos pucelanos en directo, pero cada concierto llevan una formación diferente. Esta vez tocó un dúo acústico que funciona a la perfección con los temas y el estilo de estos barbudos.
Además, como suele decirse en estos casos: "un marco incomparable" recibió a músicos y asistentes, en el Jardín Botánico de Gijón.
Un lujazo.